domingo, 17 de diciembre de 2006

DONDE SE VUELA SIN ALAS

“En el ámbito del Conocimiento de uno mismo, el tiempo se detiene.”
Esta vida, este tiempo... Si hay una persona dispuesta a ver y otra que sea capaz de mostrar, se produce magia, verdadera magia. Así es el mundo del Conocimiento de uno mismo. Aquí es donde se vuela sin alas. Donde, no los pájaros ni las mariposas, sino los seres humanos son puestos en libertad. Aquí es donde vuelan, no los que tienen alas, sino los que no las tienen.

Aquí es donde se rompen las cadenas, donde se abren las cerraduras. Aquí es donde a los desesperados se les da esperanza, donde los ciegos empiezan a ver y los sordos a oír. Aquí es donde los tristes empiezan a regocijarse y donde el odio se convierte en amor. Aquí es donde los ignorantes se vuelven cultos.

Así es la magia de este precioso, maravilloso mundo del Conocimiento de uno mismo. Aquí es donde los vivos aprenden sobre la vida, algo que no ocurre en ningún otro sitio. Es aquí donde los vivos aprenden sobre la vida.

Aquí es donde se plantan las semillas y florecen los jardines. Aquí es donde la tierra árida y estéril se transforma en frondosos bosques verdes. Este es el mundo del Conocimiento de uno mismo. Si quieres, puedes entrar en este mundo. ¿El precio? Es elevado: tener un corazón de niño. Sin engaño ni falsedad, podrás entrar. Muy caro, pero ése es el precio.

En este mundo del Conocimiento de uno mismo se detiene el tiempo. Los inmortales empiezan a hablar y los mortales hablan de inmortalidad. Los imperfectos empiezan a comprender la perfección. La puerta al hermoso templo interior se abre de par en par y la danza de todas las danzas se empieza a bailar. Suena una música que no ha sido tocada por la mano del hombre y la oyen solo aquellos que hayan entrado. Su divinidad es dulce. En este mundo, el silencio no osa entrar y no brilla la luz del sol, ni la de la luna, ni la del fuego.

El pasaje a este mundo lo tienes, y no es un viaje largo. Esa morada se encuentra dentro de ti.

Maharaji

lunes, 27 de noviembre de 2006

Cuento sobre los tres loros – Maharaji


Hay un cuento sobre un hombre al que le encantaban los loros y quería criar unos que fueran especiales. Así que compró tres huevos y mientras los loros crecían les enseñó música, física y fórmulas matemáticas. Cuando los loros se hicieron mayores, podían recitar esas fórmulas y tatarear sinfonías de Beethoven perfectamente. Pero un día el hombre murió y alguien los puso en un árbol fuera de la casa. Los loros treparon por las ramas, echando un vistazo a su nuevo hogar.

Entonces vieron a otro loro y le dijeron: “Lo sabemos todo. Sabemos montones de fórmulas”. El otro loro vio que se aproximaba un gato y les dijo: “¿Sabéis volar?”. “Por supuesto que sabemos volar. Cuando se crea presión en la parte inferior del ala, y hay baja presión en la parte superior, podemos volar”. El otro dijo: “No, no me refiero a la fórmula. ¿Sabéis realmente cómo volar?”. “Pero, con todo lo que sabemos, ¿qué importancia puede tener eso?”. “Pues eso que ignoráis es lo que de verdad necesitaríais saber y, por no saberlo, toda vuestra ciencia no os va a servir de nada”.

¿Cuál es el significado de este cuento? Significa que, aunque hayamos logrado muchas cosas en este mundo, si no hemos conseguido eso que es esencial para nosotros, todos nuestros logros no nos servirán de nada.

domingo, 12 de noviembre de 2006

¿Cómo puedo saber cuándo vendrá el Maestro?

Krishna, -en el Bhagavad Gita- Escritura Sagrada de la India, le dijo a Arjona, en el Capítulo 4º:

5. ¡Oh, Arjuna! Yo he nacido muchas veces y lo mismo tú, Arjuna. Pero Yo recuerdo todas mis vidas pasadas, mientras que tú las has olvidado. 6. A pesar de que nunca nací, pues soy eterno e imperecedero, soy el Señor de todo; por medio de mi maravilloso poder, vengo a este mundo manifiesto. 7. Siempre que el bien decae extinguiéndose poco a poco, predominando en su lugar la maldad y el orgullo, Mi Espíritu se manifiesta en forma humana sobre esta tierra. 8. Para salvar a aquéllos que hacen el bien y destruir a aquéllos que actúan con maldad, para así restablecer el reino de la Verdad. Yo vengo a este mundo era tras era.

El lugar más cercano


No intento ser gracioso, pero imagina por un minuto que fueras el Creador y decidieras diseñar el mundo de modo que pudieras quedarte lo más cerca posible de este ser que has creado, ¿dónde te colocarías?

Maharaji en Pboenix, 13 de febrero de 1994. Fragmento traducido del inglés.

Creados el uno para el otro


Déjame que te explique algo brevemente, algo que quizá te sorprenda. La naturaleza se halla en un proceso de experimentación constante, y ha alcanzado un elevado nivel de especialización. Con frecuencia, las cosas son de determinada manera atendiendo a un requerimiento concreto. Así, por ejemplo, ciertas flores han adoptado una forma particular que sólo atraerá a determinada especie de colibrí -un colibrí cuyo pico es especial, diferente al de todas las demás especies de colibríes- y, a su vez, éstas son las únicas flores a las que ese colibrí puede acudir a libar el néctar. Se han encontrado -podría decirse que, en cierto modo, se han creado el uno al otro- y, por el modo en que viven juntos en armonía, por el hecho de que este pájaro ofrece su dedicación exclusiva a esta flor, la flor asegura su propagación, y sabe que su polen no se desperdiciará.

Y en cuanto al colibrí, el hecho de haberse entregado a esa flor le asegura el sustento permanente. No ha de temer competencia alguna, porque ningún otro tipo de colibrí puede alcanzar ese néctar, está destinado exclusivamente a él, y por ello ha surgido esa unión. No fue algo que ocurriera en una noche; no, llevó su tiempo.

Como resulta obvio, ese colibrí es una de las mayores bendiciones para la flor, y difícilmente podría haber bendición más alta que esa flor para el colibrí. Existen, y fueron creados, el uno para el otro.

¿Y cuál es la bendición para el ser humano? Hemos hablado sobre la vida, hemos hablado sobre el aliento, sobre la existencia, y sí, todos ellos son bendiciones. Pero existe, además, una bendición sublime que es el maestro. El maestro, a mi entender, es la manifestación del anhelo del corazón. Sin el anhelo del corazón, no existiría el maestro.

El hecho de que algo, dentro de nosotros, busque aquello que también se encuentra en nuestro interior ha creado la necesidad imperiosa del maestro; y cuando el maestro empieza a guiarnos a través del proceso, la magia comienza. Se vuelve sencillo lo difícil; aquello que hubiera llevado toda una vida comprender, ahora es posible entenderlo en un espacio de tiempo muy breve, y el corazón empieza a danzar a medida que va llegando la comprensión. La oscuridad es remplazada por la luz; la duda, por la claridad; la confusión, por el entendimiento; y el pesar, por la alegría.

Maharaji en Long Beach, 7 de diciembre de 1996. Fragmento traducido del inglés.

QUE OFRECE MAHARAJI

"Lo que yo ofrezco es tan práctico como un vaso de agua para una persona sedienta en el desierto.

"Es una forma de conectarse con la paz y la satisfacción que hay dentro de cada uno de nosotros. Es como un puente que va del exterior al interior.

"Lo que ofrezco es para quienes por propia voluntad desean disfrutar de la paz que existe en su interior. No podría ser más práctico. Si alguien quiere esto, puedo ayudarle."

"La paz, la alegría y la auténtica felicidad no existen para que pensemos sobre ellas, sino para que las sintamos.

"Detrás del hecho de estar vivo se esconde un sentimiento. No hay explicación que valga. Es algo que debemos sentir porque eso es lo que nos reconforta. En ese sentimiento hay alegría, hay satisfacción.

"Hay una sonrisa que nada puede borrar, una sonrisa que surge de un lugar de paz y celebración tan profundo que nada puede robárnosla. Ésa es la sonrisa que todos podemos tener. La paz que reside en ese lugar, en el corazón, es la única que vale.

"Hay una sinfonía que suena en nuestro interior. Podemos despertar a esa posibilidad. Porque no es más que eso: una posibilidad. Es posible alcanzar la plenitud y la paz interior.

"Es posible comprender el valor de cada aliento y reconocer nuestro anhelo de vivir. Es posible tornar el sufrimiento en gratitud, la duda en saber, y todas las preguntas en una sola respuesta, una sola. ¿Y qué clase de respuesta es esa? La única respuesta para la que no hay pregunta.

"El hecho de que podamos estar satisfechos en nuestro interior es el mensaje más esperanzador que existe. Que tengamos la posibilidad de encontrar lo que el corazón ha buscado durante tanto tiempo, es un mensaje tremendamente alentador. Ése es el mensaje que ofrezco, un mensaje que brinda esperanza a la gente."



Prem Rawat (Maharaji)

Diálogos con el pasajero acerca del Maestro y las Religiones

Pasajero: ¿Sabes qué sucede cuando no está presente el Maestro?
Anónimo: Ya me dijiste que se empezaba a crear la Religión.

Pasajero: Por supuesto. Pero, además de esto, el proselitismo es tan grande, que se priva al individuo de elegir libremente el camino a seguir. Cuando tienes uso de razón, te ves perteneciendo a una Religión en la que tú no has puesto el menor granito de arena para adherirte a ella. Al empezar a desembarazarte del trauma psicológico, te das cuenta de lo profundo que ha sido su imposición supliendo la ingenuidad y simpleza del niño con el miedo a lo desconocido.

Me estoy dando cuenta, ahora mismo y con una claridad meridiana, que las ideas tarde o temprano se derrumban. Todo aquello que no esté sostenido por una experiencia se desmorona. Si seguimos la fe por una idea, cuando se nos pone a prueba, automáticamente caemos. Es lo que le ocurrió a Pedro al negar a Jesús antes de que el gallo cantara. En su mente estaba claro, pero más tarde, cuando se presentó el momento práctico de probar su fe, negó a su Maestro tres veces... Una cosa es la idea que tengamos de Cristo, y otra muy distinta su experiencia directa. Es muy diferente la motivación de los Apóstoles, siguiendo al Maestro constantemente, de la que pudieran tener aquellas personas que escuchaban hablar de Él. La inspiración del Nazareno alentaba de una forma muy práctica las acciones de sus discípulos. Sin duda alguna, si estamos vivos, necesitamos al Maestro vivo; y aquí no cabe la Interpretación religiosa de que Cristo ‑su espíritu‑ está presente entre nosotros, sino que necesitamos al ser vivo que ande entre sus criaturas... El hombre, aunque es el animal más evolucionado, es el único que tropieza tres y más veces en la misma piedra. Para mi es evidente que necesitamos dirección, ya que entra dentro de la naturaleza de nuestra conciencia. Anhelamos saber, conocer y aprender el arte de vivir y ser felices; para ello, necesitamos al Maestro que nos enseñe esa materia. Cristo mostraba la fórmula, el método para estar dichoso en este mundo... la gente lo seguía porque reconocieron su poder y su veracidad; y aun así los próximos a El dudaron. Tuvo que obrar muchos milagros y portentos para que creyeran. Yo me pregunto: ¿si los que siempre estuvieron con El desconfiaban constantemente, qué puede esperarse de las personas que no sólo no lo ven, sino que siguen las interpretaciones de los que dudaban ... ? Por eso se hace necesario que esté vivo quien tenga que guiarnos espiritualmente ya que no se puede seguir una Religión de un ser que dejó su cuerpo hace dos mil años.

Anónimo: ¿entonces sucederá lo mismo con las demás Religiones?

Pasajero: Por supuesto. A cada individuo le inculcan la Religión del país donde nace. Si hubieras visto la luz en la India, posiblemente serías brahmanista, budista o seguidor de Krishna. Si por el contrario hubieras venido al mundo en la región musulmana, serías islamista y Mahoma tu profeta...

Verías el Cristianismo como nosotros consideramos ahora la Doctrina que se fundó cuando desapareció Confucio o Rama, etc.

Anónimo: ¡Es curioso lo que sucede con las Religiones! A veces me he preguntado, porqué si solamente existe un Dios, ¿cómo es que hay tantas Doctrinas?

Pasajero: Tu pregunta tiene más profundidad de lo que parece, no obstante intentaré explicártelo de la manera más gráfica posible para que puedas entenderlo. Por una parte, la palabra Dios, es un concepto para definir un ente. Por lo tanto, no importa que a la concepción de ese ser se le pueda llamar: Brahma, Tao, Jehová, Dios, Alá, etc...; todos se están refiriendo a la misma entidad o esencia última. Otros lo definen como: un Ser Todopoderoso, Omnipresente, Omnisciente, Omnisapiente, Perfecto, Puro, Divino, Absoluto... Por otra parte, la palabra Dios, suele crear ciertas connotaciones referidas a la imagen del Ser que nos proyectaban de pequeños: un anciano alto, con barbas blancas, y rodeado de ángeles; así es como lo plasmaron los renacentistas, y nos guste o no es la huella que tenemos impresa en nuestro cerebro. Por lo tanto, para mi se hace evidente la existencia de algo que no tiene principio ni fin, y a eso podemos llamarlo de la forma que más nos guste; que por supuesto, no tiene nada que ver con el anciano de barbas blancas...

Dejando atrás la exposición del vocablo de cuatro letras, he podido observar la evidencia de varias constantes en todas las Religiones: se hace patente la existencia del Poder Superior; el Intermediario, Maestro o Mensajero; la Experiencia o Reino que muestran prácticamente; y el hombre como receptáculo viviente de las maravillas divinas.

En la primera constante, ya hemos hablado de las diversas maneras de definir lo indefinible, por que cada Religión le pone el nombre que quiere.

En la segunda, está claro que existe un Embajador Divino, el Puente, el Mediador, el Maestro; y que por las Doctrinas que hemos enumerado serían: Rama, Hermes, Confucio, Krishna, Moisés, Zoroastro, Buda, Jesús, Ramakrishna, etc.

En la tercera todos coinciden en cantar las glorias de los tesoros escondidos en nuestro interior: "que el Reino de los Cielos está dentro de nosotros, o que en nuestro interior florece el más glorioso de los jardines, etc...." Y por último, los coetáneos que viven en la Tierra, cuando el Maestro está presente, son los afortunados en beneficiarse de su divina presencia y de sus sabias palabras, y de su Conocimiento. Por lo tanto, todos los Enviados hablan del mismo Dios y de la misma experiencia; pero en diversas épocas, a Sociedades en diversos grados de evolución. Y con una forma de expresión acorde a la mentalidad del momento.

Anónimo: ¿Los grandes Maestros que han pasado a través de la Historia, han comunicado el mismo mensaje y han mostrado la misma experiencia liberadora?

Pasajero: Efectivamente. Lo único que variaba era el modo en comunicarlo. Date cuenta que Cristo, cuando hablaba, empleaba parábolas y un lenguaje asequible a la mentalidad de aquellos pescadores y labradores. Usaba ejemplos que hicieran referencia a su trabajo o a las actividades propias de la sociedad de aquel tiempo. Sin embargo, Buda, impartía su doctrina, recomendando que llevasen una vida de renuncia a los placeres mundanos, para que a través de la meditación o concentración en las cuatro nobles verdades se pudiera alcanzar el Nirvana o sosiego del alma; de esta forma se lograría el fin supremo que era la iluminación. Krishna, por su parte, reveló el Conocimiento de todos los Conocimientos a su discípulo y guerrero Arjuna, en medio de una batalla...

Anónimo: Después de todo lo que has expuesto sobre las Religiones y los Maestros que han venido a comunicarnos el mensaje de salvación, se me hace ineludible el preguntarte: ¿puede existir la posibilidad de que actualmente naciera alguien que tuviera el poder de mostrar la misma experiencia que hicieran sus predecesores?

Pasajero: Tengo la esperanza de que un día no muy lejano mi corazón reconocerá a ese Ser, caminando entre las masas. Será el día más glorioso de mi existencia, porque al fin podré reposar mi cabeza a sus santos pies. Mí alma enloquecida corre sin cesar de un lugar a otro, buscando el momento de postrarse ante su divina presencia. Siento que hasta que no llegue ese instante, iré errante por este mundo como un barco a la deriva. Grito desde lo más profundo de mi corazón, para que no se demore demasiado; y no sólo yo, sino que todo este Universo lo reconocerá y se inclinará ante Él. No descansaré hasta que no llegue ese día, ¡tenlo por seguro!

Anónimo: ¿Crees que la sociedad actual está preparada para recibir a un ser tan puro como los Maestros que has citado?

Pasajero: Ese es su privilegio, su carisma, su función: mostrarse a la Humanidad cuando la sociedad va en declive. Cuando reina la injusticia, para poner justicia. Cuando el hombre está preso en sus conceptos, para romper las cadenas que le oprimen el corazón. Cuando estamos muertos en vida, para revivirnos. Cuando reina el odio, para traer amor. Cuando hay sed, para saciarnos. Cuando hay guerras, para establecer la paz. Cuando sentimos tristeza, para darnos alegría. Cuando nos ahogamos en nuestras propias ideas, para rescatarnos, etc. Esa es su condición. Ya sé que no nos merecemos un ser tan bondadoso, pero su naturaleza es suplir con amor y dicha, la negatividad del ser humano. Igual que la cualidad del Sol es darnos su luz desinteresadamente la cualidad de ese Ser es inundarnos de su amor con generosidad. No podemos evitar su manifestación en la Tierra. Del mismo modo que después de la tempestad viene la calma; igual que después de la guerra viene la paz; así pues, cuando la impotencia se apodera de los gobernantes para regir los destinos de la Humanidad, este Ser sale a la luz para ayudar a sus criaturas indefensas de sus propios errores.

Anónimo: Escuchaba atentamente. No quería interrumpir al pasajero, que parecía estar sumido en un estado donde manifestaba sabiduría y esperanza para este mundo en decadencia. Sentía respeto, admiración y agradecimiento hacia su amigo, porque le había devuelto cierta confianza en él mismo y en el destino de esta sociedad materialista y sin propósito. No sabía como complacerle por el mero hecho de haber levantado el telón de la ignorancia que caía sobre sus ojos. En su corazón asentía que las declaraciones de su amigo en el aspecto religioso eran ciertas. Jamás había escuchado con tanta convicción algo que hiciera referencia a la concatenación entre los Maestros Perfectos.

Pasajero: Guardó unos minutos de silencio mientras reflexionaba profundamente sobre el contenido de las palabras que habían salido por su boca. Clavó su mirada en el horizonte y se dejó invadir por un sentimiento de armonía. Experimentaba cómo su corazón se estaba rompiendo en mil pedazos, y cada partícula se extendía por su cuerpo, inundándole de dicha; cerró los ojos y se dejó llevar por ese sentimiento.

Anónimo miraba a su amigo con asombro. No quería moverse de la posición que estaba, por no romper el denso silencio que se apoderó del instante. Este contemplaba las olas acercándose a la orilla; parecía que el tiempo había detenido sus manecillas, mientras eran cómplices del apacible momento.

Transcurrieron unos instantes de calma absoluta. Daba la impresión de que la brisa marina desbordaba sus corazones del conocimiento profundo y velado para tantos hombres. Se miraron fijamente y sus rostros reflejaban serenidad. Ningún pensamiento deambulaba por sus cerebros. Experimentaban quietud interior.

Anónimo, comenzaba a descubrir un mundo de sensaciones inéditas y reveladoras para él. Nadie había sido capaz de barrenar las murallas de su corazón como lo hiciera su amigo. Tenía la impresión de que un volcán dentro de él despertaba de su letargo milenario y fluían ríos de lágrimas de esperanzas y comprensión.

Se tomaron un descanso en la conversación para darse un baño. Ambos se adentraron en el mar dispuestos a nadar un poco. Pasajero disfrutaba al máximo del día de relax que se había tomado. Por un lado desarrollaba su deporte favorito, y por el otro profundizaba en los temas capitales para él.

Anónimo: Antes has comentado algo referente al reconocimiento del Maestro verdadero. ¿Es que se va a intentar usurpar la supremacía de la Perfección encarnada?

Pasajero: Por supuesto que sí. Ya está reflejado en las Escrituras, prediciendo que se levantarán falsos Profetas, y que cada uno de ellos dirá que es el genuino. Amigo mío: estamos viviendo el período de máximo esplendor de la Humanidad, donde los logros alcanzados son increíbles. El hombre ha conquistado el espacio. La ciencia ha evolucionado a pasos agigantados: niños probetas nacen en los laboratorios; podemos programar el nacimiento de criaturas superdotadas. La Física nuclear ha crecido inconmensurablemente. Las Comunicaciones han visto superadas sus expectativas... Paralelamente las calamidades a las que nos vemos sometidos son realmente funestas; la riqueza del mundo está desproporcionada; ecológicamente estamos destrozando el planeta; nos amenaza una conflagración nuclear a escala mundial; no existen alternativas políticas para la mejora de la Sociedad; el paro, la inflación y la crisis económica están alcanzando cotas peligrosas; el terrorismo, la mafia y otros grupos están sembrando el pánico entre los ciudadanos... En fin, creo que podría seguir enumerando logros, estragos y toda serie de metas a las que el hombre ha llegado en aras de un mejor bienestar social de la raza humana. Pero ya me dirás lo que ha conseguido la ambición del hombre por el poder.

Actualmente estamos viviendo una época brillante, pero también es el tiempo de máxima oscuridad. En esta etapa de la Historia que nos toca vivir, algunos seres motivados por el afán de poder, intentarán establecer salidas prácticas a la crisis mundial. Por supuesto, aquí es donde entra la parte religiosa que nos atañe en estos momentos. Falsos líderes espirituales se levantarán como portavoces de soluciones al desastre, protagonizando arengas doctrinales repletas de fanatismo... Por eso, no me extraña que las motivaciones por miedo a lo desconocido, y al juicio final del que hablan las Escrituras, puedan ser los estandartes de los falsos Profetas en pro de la salvación de las almas descarriadas. Así pues, asumirán unas competencias que no les incumben, ya que el verdadero Maestro, es en definitiva, el que nos puede socorrer ante la desgracia mundial...

Pasajero: Para mi es la mejor era, porque podremos ser testigos de cómo se implantará la Justicia, el orden y la paz, en una sociedad donde parece que lo único que reina es la negatividad y las pasiones más denigrantes del hombre. Esta Edad de máxima oscuridad, es a la vez la que precede a la Edad de Oro. Por lo tanto, debemos vivir con la esperanza de que un día no muy lejano se manifieste un Ser para que establezca su reinado para siempre en este planeta. Entonces el hombre ocupara su lugar privilegiado en la Tierra y podrá llevar a la práctica el propósito para el que ha sido creado: vivir en paz y felicidad, realizando el fin supremo que reside dentro de nosotros.

La soledad del pasajero

Es curioso; puedes estar rodeado de gente y sin embargo, sentirte solo. 0 por el contrario, estar en un lugar tranquilo, retirado del bullicio callejero, y también sentirte aislado, saboreando el placer o la angustia de la soledad. Ahora me doy cuenta que soy un ser solitario en este mundo. Me siento como un parásito perdido en la infinidad del Universo. Camino al lado de muchos seres, pero mi andar es individual. Busco la fuente de mi destino para seguir evolucionando hacia la perfección. Nadie tiene acceso a mi mundo; tan sólo yo conozco las reglas de su funcionamiento. Me siento como un cometa siguiendo una órbita distinta al resto de los seres humanos.

Experimento un universo lleno de sensaciones y vivencias, que sólo yo puedo entender y no compartir; porque también los otros tienen su propia estrella fugaz, trazando la estela de su vida por este planeta.

¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Por qué cada uno cogemos distintos senderos en esta vida, y, sin embargo, estamos llamados a entendernos y a aceptarnos? ¿Cuántos interrogantes quedan todavía en mi crepúsculo interior? ¿Quién me desvelará el telón de la sabiduría? ¿Quién compondrá el rompecabezas de mi vida? ¿Quién encenderá la llama en la selva negra de mi ignorancia? ¿Dónde estará ese faro que corrija el rumbo de la embarcación perdida, en el océano turbulento de mi mente? ¿Quién me tomará en su regazo cuando pierda la orbita de mi existir? ¿Quién guiará mis pasos cuando deje de latir este corazón desolado?

La súplica del pasajero

¿Dónde te escondes? ¡Sé que existes! Distingo tu presencia. Adivino tu estirpe. Presiento tu naturaleza. Gozo de ver; la placidez de tu rostro, tan brillante.
Quiero estar despierto cuando vengas. No tardes demasiado; puedo romperme.
Oigo la cadencia de tu voz, tan melodiosa, desmoronando las murallas de mí corazón.
No permitas que duerma; mantenme despierto cuando tú estés.
Déjame percibir la fragancia de tu ser; y así mi cuerpo quedará impregnado de tu aroma.
Cuando vengas, por favor, no llames; mi corazón te reconocerá al instante.
Respirando tu amor, mi alma se desborda, y cada célula de mi cuerpo salta de gozo.